viernes, 20 de julio de 2012

Faltan calificados

Desierto”, “desierto”, “desierto”, “desierto”, “desierto”. La palabra se repite en un par de carillas de un informe  que descansa en el despacho de la directora de la Oficina Nacional de Servicio Civil (ONSC), Elena Tejera. Allí se detalla el estado de diversos llamados a profesionales donde la administración pública no pudo conseguir personal calificado que demandan organismos públicos. Ello sucede porque el Estado paga menos (o mucho menos) a determinados profesionales por la misma tarea que realiza en el ámbito privado.
En ese último reporte de concursos declarados desiertos, al que accedió El Observador, se buscaron técnicos electricistas, especialistas en administración de software, economistas, agrimensores, ingenieros químicos, ingenieros hidráulicos y auxiliares informáticos, entre otros.
Para superarlo, la administración de José Mujica está dispuesta a competir con los privados con mejores salarios.
La herramienta será generada en la reforma del estatuto del funcionario público y de la carrera administrativa. Allí se establecerá el pago de salario de acuerdo a tres componentes. El primero referente al cargo, calculado de acuerdo al escalafón y el nivel adonde el funcionario desempeña funciones (algo que también cambiará porque, el sistema actual se divide en 16 grados y 9 escalafones, y el nuevo está pensado en cinco grados y tres escalafones). El segundo elemento para determinar el salario será denominado por “ocupación”. Ello implica la especialidad del profesional.
Por último, el Poder Ejecutivo tendrá la posibilidad de incrementar el salario de los profesionales a los que no puede acceder por la demanda del mercado. Para ello suma al esquema de retribución un “componente estratégico”.
¿Qué significa? Con el asesoramiento de una comisión que la crea el artículo 8 del proyecto de rendición de cuentas a estudio del Parlamento, integrada por la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), la ONSC y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el Poder Ejecutivo podrá decidir, en caso de que el mercado laboral y las cifras objetivas del Instituto Nacional de Estadística (INE) lo demuestren, incrementar la oferta salarial para cargos especializados. Luego se determina también si se requerirá o no dedicación exclusiva.
El Poder Ejecutivo tendrá libertad para ofrecer el dinero que considere necesario para obtener candidatos. El porcentaje o los topes será materia de la reglamentación de la carrera administrativa, cuando sea ley.
“Sabemos que el Estado, en niveles de ingreso, en algunas categorías laborales paga un poco mejor que lo privado, pero en los niveles altos el Estado paga muchísimo menos, sobre todo a nivel profesional”, dijo Tejera a El Observador.
El componente estratégico, según la directora de la ONSC, está pensado para “competir”.
Sin embargo, los incrementos salariales por esa razón serán “coyunturales y variables”. Ello significa que, si luego de un tiempo determinado por el Poder Ejecutivo, el mercado o las condiciones para haberle ofrecido más dinero al profesional cambian, la administración podrá quitar el componente estratégico y, por consiguiente, bajará su salario.
El nuevo sistema del componente estratégico fue incluido en la última rendición de cuentas en el artículo 7, que generó confusión entre legisladores y funcionarios públicos, y debió ser explicado por Tejera en el Parlamento.
El nuevo estatuto, que dará sentido a ese artículo 7, pero también al 6 y el 8, será enviado en un mes a la Cámara de Representantes, cuando se vote allí la rendición de cuentas. La idea del gobierno es tenerlo vigente en 2013.
En la actualidad, entre 20% y 40% de los salarios en el Estado corresponden al “cargo”, y el resto a diferentes logros que sindicatos han conseguido en discusiones de presupuesto y rendiciones de cuentas, eso que la directora Tejera llama “lobby” sindical (ver en línea). Esa estructura salarial es rígida y, por lo tanto, se observan diferencias abismales en salarios de funcionarios en los mismos grados y escalafones.
En el nivel 1, por ejemplo, había 1.517 funcionarios en 2010 que ganaban $ 16.000 en promedio; $7.000 los que ganaban menos, y “dos o tres” funcionarios de la Dirección General Impositiva (DGI)   $65.000. Lo mismo en el grado 2, donde en 2010 había 500 funcionarios: entre ellos había salarios de $16.000, $17.000 , $8.000 y algunos de $42.000.
El sueño de ingresar al Estado y asegurarse el futuro con un empleo público, esa idea tan arraigada en la sociedad uruguaya, parece no tener sustento para quienes poseen una calificación o especialidad superior. A juzgar por los salarios ofrecidos, la premisa se mantiene todavía para los que no acceden a calificarse.

Si! Deporte en la oficina!



Gobierno lanza plan para hacer ejercicio en horas de trabajo

"Activa.T" es el nombre de una campaña que busca sacar del sedentarismo al 65% de la población.

El 65% de los uruguayos es sedentario y el problema comienza a gestarse en la temprana juventud. Hasta los 17 años, tres de cada cuatro personas hacen actividad física, pero el porcentaje desciende abruptamente entre los 18 y 29 años: en ese tango de edad, apenas 30% hace deportes y es físicamente activa.
Las mujeres tienen aún menos actividad física que los hombres: un 25% de ellas hace gimnasia o camina con regularidad en la edad adulta, según una encuesta nacional de actividad física que lanzó el Ministerio de Turismo y Deportes.
El Estado inició la campaña “Activa-T en el trabajo" para promover el ejercicio físico en horas de trabajo.
Estos programas se desarrollan en muchas partes del mundo, al demostrarse que entre 20-30 minutos de ejercicio físico en horas de trabajo aumentan la productividad de trabajador, además de mejorar su salud.
El profesor Enrique Cobas, Inspector Departamental de Educación Física aseguró que los porcentajes de sedentarismo "asustan".
Carolina Curbelo, referente local de la comisión, destacó que el programa surgió para fomentar la actividad física por su relación con la prevención del cáncer y otras patologías.
El plan se propone que instituciones públicas y empresas privadas se sumen a la iniciativa y apoyen con acciones concretas. Curbelo señaló que no es necesario ir a un gimnasio o una plaza de deportes para tener actividad física.


martes, 17 de julio de 2012

Retribución por desempeño

MARCELA DOBAL
Siete de cada 10 de las principales empresas del país tienen algún sistema de remuneración en base al desempeño, según datos de marzo y abril. El porcentaje variable alcanza al 5% del salario total en cargos operativos y al 70% en la dirección.Los datos surgen de la quinta edición de la Encuesta de Expectativas empresariales que realizó Deloitte, de la que participaron 245 directores o gerentes de las principales empresas de Uruguay y fueron consultados sobre las prácticas de remuneración variable.En los lineamientos que el gobierno presentó para la negociación salarial de los convenios colectivos a tres años se prevé trabajar este año incorporando el "desempeño" como variable para el ajuste, además de cláusulas para renegociar el salario en caso de estancamiento o pérdida de productividad en cierto lapso.Si bien el 70% de los encuestados por Deloitte dijo contar con un esquema en función de desempeño, la proporción de tiende a ser mayor en los servicios, mientras que en las industrias se observan los porcentajes más bajos.Deloitte señala en su informe que "la determinación de la remuneración variable es particularmente importante para la alineación de los objetivos de las personas con los de la organización". Añade que "tiene influencia directa sobre la atracción y retención del talento".
En base a un ejemplo, el informe muestra que, a medida que aumenta la jerarquía del rol, mayor es el porcentaje de remuneración variable sobre el total percibido por el asalariado. Así, los puestos operativos cuentan con un salario base que representa el 95% de su remuneración total y un 5% de incentivo anual. En tanto, en los profesionales y técnicos el incentivo anual por desempeño pasa a ser el 10% del total y en los mandos medios el 25%.
En los cargos de mayor jerarquía, además del incentivo anual se incluye uno de largo plazo. El salario base representa la mitad de la remuneración total a nivel gerencial y la otra mitad se reparte en un 25% por el incentivo anual y otro 25% por el de largo plazo. En la cúspide de la organización, los puestos de dirección, solo el 30% suele ser salario base, un 20% incentivo anual y un 50% son incentivos de largo plazo.
El peso de la remuneración variable en el total a nivel de gerencias en Uruguay (tanto la general como las de área) es similar a la de Chile, pero difiere mucho de otros países sobre los que Deloitte dispone de datos. En ambos países, el porcentaje de remuneración variable en las gerencias es inferior al 20% y no varía sustancialmente entre las de área y la general.
Debe tenerse en cuenta que por remuneración total se entiende el sueldo base, más la remuneración variable y otros beneficios no monetarios (los automóviles para cargos gerenciales, por ejemplo).
Otro país que más se asemeja a los niveles de Uruguay es Brasil, donde poco más del 20% de la remuneración total de las gerencias generales es variable, aunque los niveles apenas superiores al 15% en las gerencias de área. Por el contrario, en Perú y México el componente variable supera el 30%. En el país norteño el porcentaje supera incluso el 35% en el caso de las gerencias generales.
Ecuador, en tanto, es el único relevado de la región que presenta una situación mixta: el componente variable de gerentes generales es similar al de Perú y México (más próximo al 40%), pero la proporción en las gerencias de área se asemeja más a la de Uruguay, Chile y Brasil (es de un 25%).
LAS VARIABLES. La remuneración variable tiene en cuenta el desempeño de la empresa, del área en la que trabaja el empleado y su desempeño individual. El peso de cada uno de estos componentes en Uruguay difiere según la jerarquía, reveló la encuesta de Deloitte.
En el único caso en que la remuneración por el desempeño de la empresa es la que incide más es en los cargos gerenciales (lo que se encuentra "en línea con las mejores prácticas, dice la consultora), ya que en los demás casos pesa más el individual. Allí la remuneración variable se compone en un 57% por ese factor, un 24% por el desempeño del área en cuestión y un 39% por el propio.
En los mandos medios, en tanto, el peso del desempeño de la empresa es de un 35%, el del área es un 27% y el individual un 39%. Esos mismos porcentajes a nivel de cargos operativos son 25%, 16% y 34%, respectivamente.
Dentro de los indicadores que pueden emplearse para determinar la compensación variable se encuentran los índices de productividad, que el gobierno intentó fomentar en la ronda de negociaciones salariales de 2010. Deloitte señala que una de las razones por las que esa iniciativa no prosperó fue que "los indicadores propuestos presentaban grandes variaciones de un año a otro".
Los lineamientos para las negociaciones de 2012 también hacen una apuesta hacia la utilización de esos indicadores. La consultora destaca que para que sean aceptados deben ser "creíbles, simples y relativamente fáciles de pronosticar".
Gobierno: Pretende que en las próximas negociaciones se sume pago por desempeño.

Domésticas ajustan hasta 7%

La Liga de Amas de Casa comunicó los ajustes salariales que rigen para el personal doméstico y que alcanza hasta un 7% para el período entre el 1° de julio y el 31 de diciembre. El salario mínimo aumenta 6,9% hasta $ 8.534 por 25 jornales y 44 horas semanales. El equivalente por hora pasa a ser de $ 44,9. Quien percibía hasta junio $ 9.639,9 por 25 jornales/44 horas semanales o $ 50,7 por hora recibirá un ajuste de 7%. A quien cobraba entre $ 9.639,9 y $ 10.027,1 o entre $ 50,7 y $ 52,7 se le aumentará un 6%. Quien percibe más de $ 10.027,1 o $ 52,7 por hora tendrá un ajuste al alza de 5%.
El País Digital

RIP Covey


miércoles, 11 de julio de 2012

Foro

Hola a todos:
Teniendo en cuenta el objetivo de este blog (crear un espacio de opinión entre estudiantes de rrhh de todo el país) les propongo el siguiente tema que ví publicado en un foro de Link In:

Ustedes creen aplicable a las búsquedas de personal y a sus resultados, una frase de un importante médico francés llamado Claude Bernard (1813-1878) que decía:

" El que no sabe lo que busca, no entiende lo que encuentra ". Menudo desafío, Estimados.

¿Que piensan ustedes?

Saludos a todos!
Ari 

Economía y trabajo

Cuatro de cada 10 uruguayos ganan menos de $ 10.000 al mes

Mujeres, jóvenes y personas de escasa formación integran los llamados diezmilpesistas


A pesar de que los salarios de menores ingresos fueron los que más crecieron durante el último año, 38,7% de los trabajadores uruguayos continúan ganando menos de $ 10 mil por mes. Los diezmilpesistas son una población de riesgo que se concentra principalmente en jóvenes, mujeres y personas de escasa formación educativa.

Según un estudio realizado por el equipo de técnicos del instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT, 614 mil trabajadores no llegaron a cobrar $ 10 mil mensuales durante 2011. Con relación al año anterior, el número de diezmilpesistas –ajustado por inflación– se redujo 8,5% en Uruguay. “Si bien puede considerarse una caída importante, resulta claro que el fenómeno de los salarios sumergidos aún continúa afectando a una porción muy importante de los trabajadores uruguayos”, señala.

Más de la mitad de los uruguayos (57%) ganaron menos de $ 14 mil por mes durante el último año, mientras que el porcentaje de los trabajadores que obtienen un salario mensual líquido por encima de $ 30 mil es de 12,9%. Solo 4,3% del total obtuvo más de $ 50 mil mensuales, según la investigación.

Los ingresos sumergidos se asocian en Uruguay principalmente a las mujeres y los jóvenes. Otra característica que presentan los trabajos que menos pagan es la baja calificación que poseen y la falta de registro en la seguridad social, lo que aumenta la vulnerabilidad de los trabajadores ante un revés del ciclo económico.

Mientras que las mujeres representan 34% de los trabajadores que perciben menos de $ 10 mil, su participación decae a 23% entre los asalariados que ganan más de $ 50 mil, lo que muestra que los niveles más bajos de remuneración presentan una mayor inclinación a las mujeres que los más elevados.

En cuanto a los jóvenes, el estudio realizado por Cuesta Duarte con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), entre los menores de 25 años, 63% forman parte de la categoría de diezmilpesistas mientras que solo 7% percibe más de $ 20 mil mensuales.

Los años de estudio y las etapas cumplidas en la educación formal tienen una fuerte incidencia en la posibilidad de las personas de acceder a salarios más altos.

El estudio revela que entre quienes solo alcanzaron a completar sus estudios primarios, 54% gana menos de $ 10 mil y 36% percibe entre $ 10 mil y $ 20 mil. En el otro extremo, los salarios de aquellos trabajadores que completaron sus estudios universitarios, “tienden a concentrarse en los niveles salariales más altos”. De hecho, 33% percibe entre $ 30 mil y $ 50 mil y 23% se encuentra por encima de esa franja de remuneración.

En cuanto a los sectores de actividad, el instituto Cuesta Duarte explica que las ocupaciones  que concentran una mayor cantidad de salarios sumergidos son las relacionadas con el sector primario –agricultura, ganadería y pesca– y el sector comercio, restaurantes y hoteles. Solo el sector de los servicios concentra a 210 mil  asalariados que ganan menos de $ 14 mil mensuales. En tanto, los establecimientos financieros tienen a casi 25% de sus trabajadores con sueldos mayores a $ 30 mil.

Durante el último año, el crecimiento más importante de los salarios se dio en las franjas más bajas. Al organizar en cinco grupos a la población ocupada (quintiles), la remuneración del 20% más pobre de los trabajadores aumentó 14,9% durante el último año, mientras que para el 20% más rico el crecimiento fue de apenas 4,3%.

Se trata de un fenómeno reciente. Según Cuesta Duarte, “fue fundamentalmente en 2011 cuando los trabajadores con menores salarios obtuvieron mejoras significativamente más importantes”. Eso se debió al énfasis que se puso por parte de las autoridades en los últimos Consejos de Salario para impulsar en mayor medida los sueldos más bajos.

De hecho, los técnicos del instituto explican la caída de los niveles de desigualdad en el último año a partir de ese diferencial establecido en la negociación colectiva, de 0,424 a 0,402 en el índice de Gini.
En cifras

12,9%
Un grupo selecto. Poco más de la décima parte de la población alcanza un salario superior a los $ 30.000, compuesto principalmente por universitarios.

7%
Jóvenes. Entre los menores de 25 años, alcanzar un sueldo alto es mucho más difícil en Uruguay. Las estadísticas muestran que uno cada 14 gana más de $ 20.000.